Gente cantando en sus balcones, en algunos casos en coro con sus vecinos; artistas transmitiendo conciertos virtuales en vivo; músicos profesionales ofreciendo recitales; y este sábado que acaba de pasar el encuentro mundial de la OMS llamado One world: together at home. ¿Por qué la música nos salva?

La música es un aspecto esencial para la felicidad y una de las actividades que provocan más placer en los seres humanos. La neurociencia explica esto por la secreción de dopamina, un neurotransmisor que se libera en el cerebro al escuchar las canciones favoritas. Por esto, los expertos indican que rodearse de sonidos musicales, sobre todo en tiempos de aislamiento social, contribuye a mejorar la salud mental previniendo trastornos como la ansiedad o el estrés.
“La música no se detiene porque es una necesidad humana”, expresa Javier Asdrúbal Vinasco Guzmán, jefe del Departamento de Música de la Universidad Eafit de Medellín. “En la actual emergencia, la música adquiere una relevancia mayor, pues nos permite mantener un sano equilibrio en nuestra parte emocional”, complementa el músico, quien promueve desde la Universidad una serie de recitales llamados Conciertos de la Esperanza, un espacio virtual de música en vivo que es interpretado por profesores eafitenses durante la cuarentena.
Como se ha evidenciado en medio del aislamiento, la música se ha convertido en un canal de encuentro para las personas de distintos lugares del mundo. Desde los recitales ofrecidos por espontáneos en balcones de distintas ciudades europeas y colombianas, hasta las iniciativas de famosos artistas con conciertos virtuales desde sus casas, se demuestra el poder sanador del arte en tiempos difíciles.
“La música promueve actitudes cooperantes y al ver a los demás en respuesta de actitudes similares esto provee contención emocional, hace que el estrés percibido se atenúe, en la medida que se comparte con los demás. Es una estrategia de regulación de estrés y la música nos lo hace más fácil”, dice Jorge Mauricio Cuartas Arias, psicólogo y profesor del Departamento de Piscología de la misma universidad.
Lo que explica el profesor Jorge Mauricio es una de las razones del programa musical One world: together at home, promovido por el movimiento internacional Global Citizen y la Organización Mundial de la Salud (OMS), que fue transmitido en vivo este sábado 18 de abril por televisión e internet. El evento se realizó en apoyo al personal sanitario que enfrenta la pandemia con la participación de figuras del entretenimiento, como Jimmy Fallon, Lady Gaga, Andrea Bocelli, Alanis Morrissette, Jhon Legend, Paul McCartney y Steve Wonder, entre otros. En representación de Colombia estuvieron los artistas Juanes, J Balvin y Maluma.
Momentos como estos, donde músicos del mundo se reúnen para compartir su talento en fines altruistas, también se han presentado recientemente en casos de ayudas a damnificados de desastres naturales o para promover la paz mundial. “La música es una metáfora para esta realidad, desde el punto de vista de la socialización que estamos viviendo. Una reflexión que he tenido estos días es cómo una serie de palabras como confinamiento, aislamiento o socialización se resignifican a partir de ahora. Me ha sorprendido ver a los artistas interpretando y compartiendo canciones desde sus casas”, comenta Juan Carlos López Díez, magíster en Historia Social y conocedor de Woodstock, un festival musical que marcó un hito en los años sesenta por el papel social contra la guerra.
Frente a las realidades actuales, a través de la música se están promoviendo diversas actividades de cooperación, tanto artísticas como filantrópicas. Para los expertos, la música tiene un efecto inmediato en la emocionalidad de las personas y habilita la reflexión durante los tiempos de crisis, lo que ayuda a autorregular el estrés y fomentar conciencia frente a los desafíos sociales.
“Las actividades en los balcones responden a nuestra necesidad social, porque el hecho de salir a cantar tiene que ver con el asunto de que me quiero seguir conectando con el otro”, manifiesta Maríantonia Lemos Hoyos, doctora en psicología y profesora del Departamento de Psicología de Eafit. “El arte, la pintura, la escritura y las formas artísticas empiezan a cobrar un valor fundamental, pues pueden ser actividades para que las personas se relajen. Para los seres humanos es muy importante en el tiempo libre buscar actividades que aumenten la sensación de placer”, complementa.

En relación con los momentos de esparcimiento durante la cuarentena, el psicólogo Jorge Mauricio Cuartas advierte sobre la importancia de estos espacios para el manejo de la angustia que puede generar la situación de emergencia sanitaria. Para el experto, elegir la música apropiada en el momento indicado de las actividades diarias es fundamental para gestionar de manera correcta nuestras emociones. “Es, sin lugar a duda, la mejor estrategia para que la música se sume a nuestro bienestar subjetivo y atenúe los estresores que aparecen cuando viene la distancia social”, concluye el experto.
Conciertos diarios para la esperanza
Todos los días al finalizar la jornada, la comunidad eafitense disfruta de 15 minutos de concierto en vivo a través de la plataforma virtual Teams. A las 5:30 p.m., desde el pasado primero de abril, los profesores del Departamento de Música de la Universidad ofrecen un corto recital que contribuye al bienestar emocional de los escuchas que permanecen en cuarentena.
Se llaman Conciertos de la Esperanza e intervienen los músicos con piezas instrumentales en las que son especialistas. Algunos de estos han sido el maestro Samuel Brian Farley, en la interpretación de piano jazz; y el maestro violonchelista Javier Arias, quienes han hecho parte de estas veladas virtuales.
La propuesta tiene el objetivo de ofrecer un momento de esparcimiento familiar, en medio de la rutina del aislamiento. Javier Asdrúbal Vinasco, jefe del Departamento de Música, destaca este espacio donde se escuchan sesiones de música colombiana, jazz y clásica como una manera de proveer bienestar a la comunidad universitaria.
“En estos momentos hay más conciertos por streaming que presencialmente. Esto nos dejará aprendizajes importantes y acelerará el proceso de transformación del medio musical. La música no se detiene y los seres humanos necesitamos comunicar lo que pensamos y sentimos”, comenta el profesor.
Agencia de Noticias Eafit